Es tan sólo una lágrima...


Si se han podido dar cuenta una lágrima es un corazón al reves, y lo digo de forma y fondo, porque en su forma, si volteas la lágrima es un corazón, y, de fondo una lágrima parte de un corazón, del alma, del sentimiento..., sin tomar en cuenta la razón.
Podemos denotar que el sentimiento tiene varias categorías; una lágrima es dolor, tristeza, alegría, decepción, rebeldía, o, simplemente, soledad y vacío.
Cuando una lágrima parte del fondo de un corazón, nuestro cuerpo sufre una transformación, y la piel se eriza, los poros se abren y gritan, las sensaciones son mas electrizantes, y sólo le queda brotar y rodar por la mejilla.
Hay lágrimas que mojan la cara, ruedan y caen, hay lágrimas que brotan y se desvían a mitad del camino, incrustándose en la boca, y, hay lágrimas que no se ven, sólo se sienten y te arrugan el corazón, hasta dejarlo chiquito, a punto de ser lanzado a la papelera.
Cuando el universo llora, no hay explicación ni razón, cuando el universo llora, se funde un deseo con un corazón, cuando el universo llora, cada lágrima tiene un color, por eso es, que cuando el universo llora, es que un arcoiris miras, en representación del mas ferviente amor.
Permítete a ti mismo llorar hacia afuera, permítele a las lágrimas salir, descargando un poco la condensación de energía, que, sea positiva o negativa, es energía, que necesita ser liberada.
Llorar no es debilidad, llorar es demostrar que estás vivo, y dar a conocer que reaccionas ante un estímulo que te afecta o te regocija.
Dicen que llorar es cosa de mujeres, porque según dicen:"los hombres no lloran", para mi, eso es falso, porque el simple hecho de pertenecer a este planeta, ya eres ser humano, y el hombre, al igual que la mujer, siente, padece y reacciona, y el hecho de dejar aflorar sus sentimientos no lo hace menos hombre, mas bien lo hace mejor ser humano.
Que hermoso es aquel hombre que llora en silencio, una pérdida, un fracaso, un error, una soledad, una falta, una carencia, una ausencia...una necesidad. Hay dias en que lees ciertas frases, y sabes que esa persona grita un s.o.s..., pero no porque esté muriendo, sino porque su necesidad de compañía es profunda.
No hace falta ver un rostro húmedo para saber que sufre, que llora, que padece, que necesita de una mano que le diga..."cuenta conmigo", por eso hoy digo a todos mis lectores, que aquí hay una mujer, un ser humano, una persona, que hoy les dice, cuenten conmigo, aquí está mi hombro, mi mano amiga, mi corazón abierto y mi arcoiris de alegría, donde cada lágrima es un te quiero mucho...Chao.

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