Esta frase pareciera que nos estamos refiriendo a hacer ejercicios físicos, y talvez nuestra educación, nuestro tiempo limitado, nuestra pereza, o simplemente nuestra enseñanza, no permite aceptar hacerlo, no sabiendo que los ejercicios no son solamente para los deportistas, para los adolescente, para los enfermos, para los niños o para aquellos que lo hacen por costumbre.
El ejercicio es para mantener el cuerpo, alma y mente constantemente activa, al igual que los sentidos, porque sudamos ( piel ), miramos cada ser humano que nos pasa por un lado, miramos las plantas y/o todo lo que nos rodea ( vista ), olemos el perfume de las flores, los montes, las personas, un rio si lo hay, o cualquier olor que traiga la brisa ( olfato ), oimos los sonidos de los pájaros, de la brisa, de una música, de nuestros semejantes ( oido ) y al probar un rico helado o un fresco trago de agua por tanto ejercicio, ponemos en práctica el ( gusto ).
A mi particularmente no me gustan los ejercicios físicos, porque me cansan, y me torturan, además no aprendí esa categoría, muy pocas veces he hecho ejercicio en mi vida, sólo en casos especiales... 1-cuando era adolescente en el liceo, 2- cuando fui operada de cáncer y debí hacer ejercicios cardiovasculares para el corazón y 3- cuando me he sentido estresada. Del resto no.
Hoy el título del blog no es referido a los ejercicios físicos..., porque cuando digo en constante actividad me refería al alma, a los sentimientos, a la actividad emotiva..., osea a nuestro crecimiento personal, como ser humano, como gente, como ser viviente.
Si observamos un depósito de agua y no se recicla o no está en movimiento, se pudre, le cae contaminación, animalitos, basura, y hasta puede llegar a secarse el sitio donde esté depositada, de ahí parte la idea de limpiar las piscinas, las albercas o los rios artificiales. Para limpiar la descomposición que el agua ocasiona.
De esa misma forma creo o considero yo que el alma necesita estar en constante actividad, y esto se logra de una manera muy fácil y eficaz, porque si nos dejamos guiar por la fuerza divina del espíritu santo y elevamos la mirada al cielo, en búsqueda de la misericordia del Padre, es ahí donde comienza el reciclaje o la limpieza del alma.
Muchas personas tienen la convicción la vida depende de la suerte, y no se han dado cuenta aún que la suerte NO existe, nada es por casualidad, nada es por aventura , ni al azar, nada es porque quiso suceder así, porque TODO en este maravilloso planeta tierra, ocurre por obra de Dios, por su permiso y voluntad..."no cae una hoja de un árbol , ni un cabello de cualquier cabeza, que no lo haya permitido el ", Dios se nos puede acercar en personas, cosas , animales o situaciones, lo importante es que nuestra antena este bien conectada hasta donde el se encuentra, que no haya interrupciones ni señales desviadas.
Debemos practicar ese grafitti que muchas veces leemos "Mantén este lugar limpio "..., esto lo deberíamos aplicar en nuestro interior...Chao
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